SERGIO RAMÍREZ. Escritor y exvicepresidente de Nicaragua

“La lectura abre a la personas a no aceptar verdades establecidas, y ésta es la verdadera esencia de la Educación”

El escritor nicaragüense ha visitado recientemente la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, invitado por la Cátedra Vargas Llosa. En la institución académica ha ofrecido varias charlas a la comunidad universitaria y se ha reunido con escritores y gestores de la cultura canaria.

1. ¿Es la primera vez que acude a la ULPGC para impartir una charla o encuentros literarios?

No es la primera vez que vengo a Gran Canaria pero siempre disfruto de la estancia, y esta vez especialmente gracias a la invitación de esta Universidad y de la Cátedra Vargas Llosa, que se creó en honor a este escritor peruano y que acoge a un buen número de universidades españolas y del Perú, México y de otros lugares de América Latina. Mi interés en esta invitación de viajar a España, visitando distintas universidades, es porque hablaremos de la literatura iberoamericana, la literatura de lengua española, como un fenómeno cultural que sigue atrayendo la atención mundial y que sigue acercando a más lectores.

2. ¿Qué opina del papel de la literatura en Latinoamericana?

Para mí, la literatura no es un fenómeno banal ni marginal, sino que pertenece a la esencia misma del modo de ser, de la cultura hispanoamericana y es representativa de nuestras sociedades. Y es lo que quiero explicar en mis charlas con estudiantes y en los encuentros con escritores: cómo la literatura en America Latina siempre ha estado vinculada a la realidad latinoamericana y se ha convertido en una cámara de resonancia de esa realidad. La literatura es un mundo aparte, paralelo, que aúna todos estos elementos de la cruda realidad latinoamericana que siempre nos plantea desafíos a los escritores, ya que esta literatura se nutrió, hace muchos años, del fenómeno de muchos de los dictadores, y, hoy en día, se nutre de otros fenómenos públicos que irrumpen en las sociedades como el narcotráfico o el tráfico de inmigrantes hacia los Estados Unidos. Estos fenómenos hoy en día adquieren categoría literaria.

3. ¿Y cómo se definiría usted mismo como escritor?

Yo diría que soy un escritor realista hasta la saciedad, porque no puedo desvincular la literatura de lo que está ocurriendo a mi alrededor o de lo que ocurrió una vez en la historia. Siempre estamos encontrando temas en cada página de la historia. Se trata de vestir y desvestir a los seres humanos, y utilizo a mis personajes para quitarles la vestidura de mis contemporáneos y ponerles las vestiduras de su época, porque las pasiones humanas son siempre las mismas, como el amor, la locura, los celos.. La Humanidad ha avanzado en términos científicos pero las debilidades y pasiones humanas son exactamente las mismas que hace diez mil años. Entonces para un escritor se trata, esencialmente, de ver los modelos contemporáneos y traspasarlos a otras épocas.

4. ¿Cómo valora la situación de la Educación en España?

Yo sobre la situación de la Educación en España estoy poco informado pero le puedo dar criterios generales sobre lo que para mí es la educación. En tiempos de crisis lo primero que se hace desde los gobiernos es recortar en educación y cultura para reajustar presupuestos. Para mí la educación es la más débil porque habitualmente es la que menos recibe y, en tiempos de crisis, es la primera que es recortada. De acuerdo con la Conferencia de la UNESCO de 1979 en México, el gasto educativo debe equivaler al 7,5% del PIB para que haya una estructura educativa decente en un país, y en Nicaragua, por ejemplo, no llega al 2%, estamos muy lejos. Y eso pasa en muchos países de América Latina.

5 ¿Qué le aporta este tipo de encuentros con la comunidad universitaria española?, ¿que le aportan los estudiantes?

En primer lugar para mí es importante tener este encuentro de la cultura. Conversaba con el Rector de la ULPGC que la Universidad debe estar más allá de las aulas, de la parte curricular, y encontrarse con la gente y del fenómeno de la cultura. Y hoy en día tener a un estudiante lector ya es una gran cosa: porque tener a un estudiante de física o de química que lea novelas ya cambia la perspectiva del espíritu de cada quien. La lectura de historia ficticias abre a la personas a criterios variados y de no aceptar verdades establecidas. Y ésta es la verdadera esencia de la educación. Así la Universidad tiene las ventanas abiertas a la sociedad para que entre en la sociedad y la sociedad entre en ella.

6. ¿Cómo valora entonces este tipo de iniciativas como las que desarrolla la Cátedra Vargas Llosa?

Éste es el tipo de iniciativas que vale la pena cultivar.