Entrevistamos a
ABRIL RONSISVALLE
‘El secreto tras tu pantalla’. Este es el título del nuevo Cuento Solidario de la ULPGC y de la Fundación Mapfre Guanarteme, que desde el pasado mes de enero se puede adquirir en toda la red de librerías del Archipiélago canario por tan solo 8 euros. Toda su recaudación tendrá un fin solidario: se donará a Cruz Roja. Y es que su autora y ganadora de este concurso, la joven estudiante de Periodismo Abril Ronsisvalle, es, además de una apasionada de la lectura y la escritura, voluntaria de esta ONG tan presente en Canarias.
1. Enhorabuena por el premio. ¿Ya habías tenido experiencia en el mundo literario, o escribías en algún foro?
Desde muy pequeña me interesé mucho por la lectura y, pronto, también por la escritura. Al principio eran pensamientos, frases sueltas, o pequeños relatos, pero con doce años me lancé a escribir mi primera novela. Fue una historia de fantasía propia de una niña, pero recuerdo que mi madre se emocionó tanto que quería enviarla a alguna editorial. Sin embargo, yo no quise, pues siempre he sido vergonzosa y no me veía preparada para que personas desconocidas leyeran lo que escribía, por esta misma razón tampoco me animé nunca a abrir un blog o foro. Además, era consciente de que solo era una niña y que lo que escribía no era de calidad. Sin embargo, los años pasaron y poco a poco fui ganando confianza y experiencia, lo cual me ayudó a abrirme más y a empezar a compartir mis escritos con las personas más cercanas. Mi decisión de estudiar Periodismo también estuvo relacionada con mi gusto por las letras, pues sentía que era una carrera que podría ayudarme a mejorar mis capacidades expresivas. En los últimos años, me he planteado varias veces la idea de crear una página web o un perfil en redes en el que volcar todo mi contenido, pero por una cosa u otra, nunca he llegado a dar el paso. Lo más parecido a eso que he logrado a día de hoy, es el Digital de Periodismo de la Universidad de La Laguna, en el que soy redactora, y en el que, en ocasiones, me animo a escribir algún artículo. Pese a mis estudios, mi sueño no es lograr ser una reputada periodista, sino una reputada escritora.
2. ¿Cómo te informaste de la iniciativa del Cuento Solidario de la ULPGC y la Fundación Mapfre Guanarteme, y por qué decides participar?, ¿qué te impulsó?
Como he dicho antes, siempre he soñado con ser escritora y por ello el año pasado decidí investigar sobre los certámenes literarios que estaban vigentes en busca de alguna oportunidad. Así fue como llegué a este concurso. Quedaban pocos días para que cerrara el plazo de entrega y no tenía nada escrito que se adaptara a lo que requerían las bases, pero aún así decidí intentarlo. Como mi madre me dice siempre: “no tenía nada que perder”. Me puse manos a la obra y en pocos días di forma a lo que hoy es “El secreto tras tu pantalla”, para presentarlo justo antes de que se cerrara el plazo.
3. Un elemento fundamental de esta iniciativa es su carácter benéfico. ¿Qué le dirías al lector que te está leyendo para animarlo a comprar este cuento y su repercusión social?
Pienso que a la hora de comprar un libro te enfrentas a una difícil decisión. Todos hemos estado alguna vez ante dos portadas sin saber cuál escoger, y entre muchas opciones similares. El hecho de que este cuento tenga un objetivo solidario puede hacerlo ganar muchos puntos. Al fin y al cabo, con un gesto de placer, como puede ser comprar un libro, estas ayudando a muchas personas. Me decidí a escoger la Cruz Roja, pero no hay una causa en especial. Yo soy voluntaria de la Cruz Roja y siempre que alguien nombra la palabra ONG, es esta la que me viene a la mente. Pensé que el hecho de que fuera tan conocida por todo el mundo podría animar a la gente a comprar más el libro. Al fin y al cabo, es una organización en la que las personas confían y saben que su dinero será utilizado para buenos fines.
"El hecho de que este cuento tenga un objetivo solidario puede hacerlo ganar muchos puntos. Al fin y al cabo, con un gesto de placer, como puede ser comprar un libro, estas ayudando a muchas personas"
4. Háblanos del cuento, de ‘El Secreto tras tu pantalla’ y de ese duendecillo llamado Istmy…
Creo que puede ser una interesante lectura no solo para los más pequeños de la casa, ¿no? Ahora en esta pandemia parece que está especialmente ‘hecho a medida’… Sinceramente, hasta yo me sorprendí de esta casualidad, pues el cuento nació antes de que hubiera pandemia y, por lo tanto, antes del tele-trabajo, tele-cole, tele-entretenimiento, y tantos teles-más. Es evidente que desde hace años estamos muy unidos a las tecnologías, pero en los últimos meses esto se ha intensificado muchísimo, por ello, creo que este cuento llega en el momento perfecto. Además, en cierto modo, no es un cuento solo para niños. Es corto y entretenido y creo que puede hacer reflexionar hasta a los adultos, pues son estos los que muchas veces están más apegados a las tecnologías. Se puede decir que el cuento no solo pretende entretener, sino también transmitir alguna enseñanza, y creo que esta moraleja llega en el momento idóneo.
5. La universidad puede ser un excelente vehículo de información y formación para impulsar estos interesantes concursos literarios, como este que ha surgido gracias a la iniciativa de la Fundación Mapfre Guanarteme y la ULPGC, pero también es necesario que la sociedad participe en ellos. ¿Qué le dirías a otros jóvenes como tú para animarlos a escribir y ser el autor del próximo Cuento Solidario?, ¿cómo has valorado tu experiencia y el hecho de haber trabajado también con ilustradora, traductora…?
Esta claro que para animarte a participar en esta clase de iniciativas te tienen que gustar. Alguien que no escriba o lea probablemente pensaría que esto es un rollo. Por eso, mi mensaje va para esas personas que, como yo, les encanta escribir pero lo hacen en la sombra. A esas personas les diría: “¡Anímate!”. Yo di el paso y me salió bien, pues siendo el primer certamen al que me presentaba tuve mucha suerte y esto me ha ayudado a ganar confianza y presentarme a nuevos concursos. Así que animo a todo el mundo a que persiga sus sueños, y más aún, si estos pueden tener una repercusión solidaria. Respecto a la experiencia con el Servicio de Publicaciones de la ULPGC, ha sido increíble. Ha estado llena de facilidades y ayudas, siempre con objetivos claros pero también con todas las ayudas necesarias. Además, hemos contado con un equipo maravilloso y muy bien coordinado del que han resultado dos traducciones estupendas y unas ilustraciones magníficas. Por todo ello, quiero agradecer a todos los que formaron parte de este proyecto y, sin los cuales, esto no habría sido posible.