IRIS BRITO

1. ¿Cómo decides estudiar la titulación de Traducción e Interpretación?, ¿lo tenías claro desde que eras estudiante de Bachillerato, por un especial interés en los idiomas?

Siempre me han interesado los idiomas, desde que era una niña. Cuando empecé a buscar en mi último año de la ESO lo que quería estudiar cuando finalizara mis estudios obligatorios, vi que en la ULPGC se impartía el Grado en Traducción e Interpretación, y me decanté por esa carrera.

2.  Decides escoger la ULPGC como Universidad para cursar tus estudios, y salir de tu isla, El Hierro. ¿Cómo ha sido tu experiencia estos años en la ULPGC?, ¿qué destacarías de tu formación?

La ULPGC me ha brindado la posibilidad de conocer a muchísima gente, tanto compañeros de clase como estudiantes de ERASMUS que escogieron la ULPGC para realizar su año de movilidad. A nivel formativo, la Facultad de Traducción e Interpretación ofrece una gran variedad de cursos de extensión universitaria, cosa que ha ayudado a expandir mi conocimiento sobre la carrera. Además, he tenido profesores a los que les he cogido un gran cariño, como por ejemplo a mi tutora de movilidad de Erasmus, que ahora también es mi tutora de Trabajo Fin de Grado. De mi formación, lo que más destacaría sería la posibilidad que me ofreció la universidad de hacer un curso de verano en Moscú para aprender ruso.

3. El hecho de estar estudiando una carrera universitaria relacionada con los idiomas te llevó, supongo, de manera casi instintiva a vivir la experiencia Erasmus en Alemania, como un añadido a tu formación, ¿no?

Efectivamente. Yo sabía que, si realmente quería mejorar o aprender un idioma, la mejor manera de hacerlo era vivir en un país en el que se hable ese idioma e integrase en su cultura. Me di cuenta de que, para mejorar mi alemán, lo mejor sería irme el curso entero a Alemania, y escogí la Universität des Saarlandes porque estaba situada en un lugar muy estratégico para viajar y conocer otros sitios.  

"Es verdad que no he vivido un Erasmus normal, pero estoy segura de que ha tenido más aspectos positivos que negativos. Me he visto obligada a hablar alemán más allá de pedir el café en la cafetería de la universidad"

4. Sin embargo, el grave accidente sufrido al mes de llegar a Alemania lo cambió todo… a lo que se sumó después la pandemia. ¿Cómo has vivido este último año de tu vida, a pesar de todo? ¿qué experiencia de vida te llevas?

Para ser sincera, yo creo que hay que sacar la parte positiva a todo. Este último año me ha dejado muchos aspectos positivos. Es verdad que no he vivido un Erasmus normal, pero estoy segura de que ha tenido más aspectos positivos que negativos. Me he visto obligada a hablar alemán más allá de pedir el café en la cafetería de la universidad. Además, incluso con la pandemia, me he sentido más cerca que nunca con algunas personas, incluso a miles de kilómetros de distancia. Esta experiencia ha sido más comedia que tragedia, ya que al final he aprendido muchísimas cosas y he salido más reforzada de todo. He conocido a personas maravillosas, he reforzado el vínculo con mi familia, he visto que, con tiempo, paciencia y actitud, todo se puede solucionar, que la vida hay que afrontarla, que el amor de una isla unida, en este caso El Hierro, marca la diferencia, y que, a pesar de los kilómetros de distancia, se puede estar unido.    

5.  Ahora has sido reconocida por el Programa Erasmus +, por ser un ejemplo de tesón y de ganas de vivir. ¿Cómo recibes este reconocimiento?

Me siento muy agradecida, tanto por la propuesta que hizo el anterior equipo del Vicerrectorado de Internacionalización y Cooperación como por haber sido seleccionada para recibirlo. Sinceramente, yo creo que este reconocimiento es para todos los que desde el minuto uno confiaron en mí, para los que sabían que no me iba a rendir, que iba a despertar del coma, a seguir con mis estudios y a no rendirme. También para toda mi familia, que siempre estuvo ahí.