El Mediador Familiar, un nuevo perfil profesional
Las universidades de Las Palmas de Gran Canaria y La Laguna han coincidido en la misma filosofía y en el diseño curricular de la mediación en la sociedad actual, y principalmente, en la atención a las problemáticas que se suscitan en torno a la familia. Así, han desarrollado el Master Interuniversitario de Intervención y Mediación Familiar.
“Desde las dos universidades canarias luchamos porque este Máster fuera un título oficial. Aprobado por el Gobierno central, y con validez en todo el territorio nacional, lo que le hace ser singular y diferente a otros de los que se imparten”, explicó Isabel Luján, directora del Máster en la ULPGC.
Este nuevo título, del que ya está en la calle su primera promoción, es sólo la continuación de otro: el Título Propio de la ULPGC de Mediación Familiar, que ya ha formado a 150 mediadores familiares, cuya función es servir de orientador en los conflictos familiares, y buscar junto a cada miembro de la familia, soluciones y acuerdos.
Se trata de un perfil profesional que demanda la nueva sociedad, donde la familia está en un continuo proceso de cambios. “El modelo de familia tradicional ya no es el único, ahora es mucho más plural y abarca realidades diversas: familias monoparentales, familias interculturales…”, explica Maria José Rodrigo, directora del Máster en la Universidad de La Laguna.
La apuesta de formar a mediadores familiares entre las dos universidades cubre una laguna existente en los conflictos familiares en donde se suceden casos de divorcio y separaciones, desestructuración de un núcleo familiar, o el apoyo a los menores. El enfoque del Máster es, a juicio de sus responsables, “preventivo y de promoción del desarrollo humano y de la familia en general, porque creemos en las capacidades de la propia familia para afrontar los procesos de cambio y para salir adelante en momentos de crisis”.
En Canarias, este nuevo perfil profesional tiene aún más razón de ser que en otras comunidades, ya que la ratio de divorcios y separaciones es la más alta de España, así como los casos de violencia de género y maltrato. Es en estos casos donde la familia es más vulnerable.
Registro de Mediadores Familiares
Aunque todavía no hay mediadores familiares en la Administración Pública, sin embargo, la Dirección General de Relaciones con la Justicia del Gobierno de Canarias cuenta con un Registro de Mediadores Familiares que funciona a modo de turno de oficio para aquellas familias que los demanden gratuitamente.
Además, estos profesionales pueden trabajar en gabinetes privados, en los servicios de protección del menor, en los equipos sociales de ayuntamientos y cabildos, o en colegios y centros educativos, entre otros. En todas estas áreas, el mediador familiar trabaja como una vía extrajudicial que se encarga de que se creen las condiciones para que los miembros de una familia lleguen a un acuerdo común.
La Universidad de Las Palmas de Gran Canaria imparte en la actualidad una de las especialidades de este máster: Mediación Familiar. En su docencia y planificación curricular participan los departamentos de Psicología y Sociología, Ciencias Jurídicas y Educación. En La Laguna también se imparte la otra especialidad, dedicada a la Intervención, y juntas, ambas instituciones, han estructurado el máster en cinco grandes áreas de conocimiento: Psicología, Sociología, Jurídica, Conflictología y Métodos y Técnicas de Investigación. “Nuestro propósito es formar a profesionales especializados que puedan insertarse en la Administración Pública para prestar sus servicios de ayuda”.
