Bebés boca abajo

29/09/2010

Bebés boca abajo

img_2574.jpgEl fisioterapeuta José Luís Pérez Machado ha demostrado en su tesis doctoral que los bebés a los que se les estimula a estar, durante el día, en posición boca a bajo, durante sus primeros nueve meses de vida, mejoran su maduración motora y previene que sus cabezas, en la parte posterior, sean planas.

 

Es el primer fisioterapeuta de Canarias que presenta su tesis doctoral. Por tanto, este profesor de la ULPGC es el primer fisioterapeuta doctor en la institución universitaria, un hecho especialmente relevante en el actual Espacio Europeo de Educación Superior.

 

Su tesis surgió del trabajo diario en el Hospital Universitario Materno Infantil, en el que ya lleva 22 años y que combina con su docencia en la ULPGC. “Hace una década aproximadamente comenzamos a observar una cierta intolerancia de los bebés a estar boca abajo y, al mismo tiempo, comprobamos que estaban existiendo retrasos motores leves y un aumento de plagiocefalia posicional (cabezas planas)”, indica José Luís Pérez Machado.

 

El objetivo fue, por tanto, llevar a cabo una tesis doctoral que intentara abordar los beneficios o las consecuencias de colocar a los bebes recién nacidos y hasta sus nueve meses de vida, en la denominada postura de decúbito ventral (boca a bajo) durante su jornada diaria, y el mayor número de horas posible. Esta postura resultaba totalmente compatible con la recomendada por los pediatras para dormir a los bebés, que aconseja que duerman boca arriba para evitar el peligro del síndrome de muerte súbita en niños recién nacidos.

 

hpim1814.jpgDe este modo, y contando con la colaboración de muchas familias canarias, el profesor Pérez Machado comenzó su estudio con una muestra representativa de 132 bebés normales nacidos en el Hospital Materno Infantil, y los distribuyó en dos grupos: un grupo experimental de 35 bebés y otro de control de 97 bebés. Los bebés del grupo experimental eran colocados a diario boca a bajo para que jugaran y descansaran, mientras que los bebés del grupo de control permanecían gran parte del día boca arriba, posición en la que genéricamente las madres acostumbran a colocar a sus hijos.

 

Y los resultados no se hicieron esperar: “Ya, a los 3 meses de vida, mientras unos 24 niños del grupo de control aún no mantenían el sostén encefálico, la totalidad de los niños del grupo experimental si: movían su cabeza con cierta agilidad y colocaban sus brazos en el suelo para alzarse”, señala el fisioterapeuta. Posteriormente, a los 9 meses de vida, de los 35 niños que componían el grupo experimental, 31 comenzaron el gateo, y del grupo de control sólo 8, “y porque sus padres los habían puesto boca abajo en varias ocasiones al día”.

 

Conclusiones reveladoras

La conclusión de esta tesis, estudio pionero basado en un trabajo de campo en el que se estudiaba a los bebés en sus casas, fue muy clarificadora. Estimular que los bebés, en sus primeros meses de vida, se coloquen en posición de decúbito ventral (boca abajo) mejora la maduración motora y previene la plagiocefalia posiconal. “Esto último resulta también muy importante en el crecimiento del bebé, ya que muchos estudios indican que las cabezas planas en bebés pueden tener consecuencias como algún tipo de sordera, ya que al estar la cabeza plana existe una cierta descompensación en la altura de las orejas del bebé”, señala José Luís Pérez Machado. A ello se unen casos de estrabismo en los ojos de algunos bebés no acostumbrados a estar en posición boca abajo.

 

Las consecuencia positivas de estimular la posición de decúbito ventral en recién nacidos son varias, pero cabe destacar que evita en gran media el reflujo gastroisofático (ardor en el estómago) de los bebés, y, asimismo, se ha detectado una mejora en la conducta de esos niños, “ya que al tener una mayor movilidad se consideran, desde muy pequeños, más autónomos, y no demandan tanta atención de su madre mediante lloros”.

 

Los resultados de esta tesis y el trabajo diario del Doctor José Luís Pérez Machado han permitido detectar el escaso grado de formación de los padres en la crianza de su hijo. “Los padres, en la actualidad, están muy informados y poco formados, y éste es uno de los grandes deberes de las Ciencias de la Salud: formar y promocionar en salud”. Por este motivo, Pérez Machado espera que esta tesis sirva para plantear, en un futuro no muy lejano, algún tipo de actividad relacionada con la formación de padres en la crianza de sus bebes, auspiciadas por las instituciones sanitarias.