Canarias, paraíso de la Economía Azul
El Archipiélago necesita identificar las actividades y sectores estratégicos relacionados con la nueva Economía Azul, aquella que pretende el crecimiento sostenible del medio marino y su ecosistema. Las universidades canarias serán sus grandes aliadas.
“La Economía Azul busca emprendedores que promuevan mejores soluciones de la Naturaleza para hacer frente a los desafíos económicos y medioambientales actuales”. Así se refería el economista Gunter Pauli a este nuevo concepto empresarial que se basa en optimizar los recursos disponibles en los ecosistemas naturales.
Por tanto, la Economía Azul es una propuesta de carácter transversal en una región que, en el caso de Canarias, puede constituirse como uno de los pilares de su crecimiento sostenible. La pesca y la acuicultura, el turismo costero y marítimo, la biotecnología, la energía oceánica, la vigilancia marítima o la explotación de los recursos marinos son algunas de las actividades que pueden ser un claro ejemplo de este nuevo tipo de Economía, al que el Gobierno de Canarias se está tomando muy en serio desarrollando una estrategia a varios años, y donde los expertos e institutos de investigación de la ULPGC tienen mucho que decir.
Y es que Canarias es una de las más de cincuenta regiones europeas que han planteado la Economía azul como una de sus prioridades más inmediatas, no solo en el ámbito político, sino también en sectores tan estratégicos como la energía, las infraestructuras, la fabricación y el turismo.
Así, en los últimos años, los proyectos de I+D relacionados con el ámbito de la Economía Azul han ido creciendo de manera exponencial en todo el continente europeo, y las subvenciones de la Unión Europea no se han hecho esperar. En el ámbito canario ocurre lo mismo.
Según explica el Vicerrector de Investigación, Innovación y Transferencia de la ULPGC, José Pablo Suárez, en el último año ya están pre-aprobados un total de doce proyectos I+D relacionados con la Economía Azul, alcanzando los 738.000 euros de financiación. “De ellos, un total de cuatro proyectos trabajan en torno a la biotecnología azul, acaparando el mayor importe de subvenciones de la Agencia Canaria de Investigación: 267.500 euros”, explica. Otros dos estudian el turismo costero-marítimo, y consiguen 139.240 euros de subvención,; y el resto se refieren a dos proyectos sobre bilogía marina y uno en el ámbito de la Oceanografía, de la Energía Azul, de la Acuicultura y del Transporte Marítimo.
El Polo Marino de Investigación en la ULPGC es de las infraestructuras científicas más relevantes de Canarias. La investigación que se realiza en esta universidad entorno al mar es una de las más reconocidas a nivel internacional. No en vano, es la entidad que más proyectos presenta y financia en Canarias. Este último año, han sido nueve proyectos, que han conseguido una subvención total de 516.300 euros.
El catedrático de la ULPGC, y director de la División de Microelectrónica y Microsistemas del IUMA, Antonio Montiel, destaca que algunos de los proyectos internacionales en este campo están directamente relacionados con este instituto y con EcoAqua, que colaboran conjuntamente en el ámbito de la acuicultura, concretamente desarrollando novedosos implantes microelectrónicos en peces. “Debemos ser conscientes de que el sector de la acuicultura, en Europa, emplea, de forma directa, a más de 85.000 personas, para generar sobre un 25% de la producción de pescado”, explica. “Por eso es imprescindible aunar esfuerzos en Canarias, para incrementar la eficiencia del sector a la par que la seguridad alimentaria”.
Desde los distintos institutos de investigación de la Universidad grancanaria se han recogido diversas propuestas de actuación y colaboración Universidad-empresa para contribuir a la estrategia de una implantación de Economía Azul en el Archipiélago. La colaboración y la innovación son los dos ejes de trabajo estratégicos que se perciben como necesarios para que Canarias se consolide como una región altamente competitiva en Economía Azul.