Voluntarios deportivos: agentes para el cambio social
La Unión Europea quiere actuar sobre distintas actitudes y aptitudes de su población. La desigualdad, la inclusión social, las conductas de riesgo o el desempleo son factores que están minando a muchos colectivos sociales. El deporte puede actuar como un agente de cambio.
La crisis económica y financiera mundial pasó factura a la Unión Europea, principalmente con la destrucción de miles de puestos de trabajo. En el año 2013, el continente alcanzó una elevada tasa de desempleo, nunca vista: un 10,9% en la UE y el 12% en la eurozona. Tras más de diez años desde que estalló la crisis, el desempleo sigue siendo la asignatura pendiente de los 28 países que conforman la Zona Euro, y aunque se han recuperado algunos índices, aún queda un duro camino para recuperar los niveles de empleo previos al año 2007.
El desempleo ha sido una de las causas más evidentes de las grandes desigualdades sociales, de la exclusión social de una significativa parte de la población, y con ello, del incremento de conductas de riesgo entre la población o de una mala alimentación que ha desembocado en la obesidad y el sobre peso, una auténtica pandemia en el continente europeo. Por eso, MOVE se presenta como uno de los proyectos que aportará mayor valor añadido a la Unión Europea.
MOVE significa ‘European Sport Volunteering for Health promotion, Social inclusión and Equality throuugh sport for all’, y se resume en un nuevo modelo de voluntariado deportivo que pretende ser un agente social del cambio en Europa. Liderado por el Vicerrectorado de Internacionalización y Cooperación de la ULPGC, MOVE quiere responder a los problemas comunes de la sociedad europea con el fomento de la práctica deportiva y promoviendo la salud integral, la igualdad y la inclusión social, así como nuevos empleos entre la población europea.
Se abre la puerta a una nueva visión del voluntario deportivo, un nuevo perfil profesional que se pretende diseñar tras este trabajo de investigación conjunto entre la ULPGC y diez entidades más de toda Europa: de Lituania, Portugal, Rumanía, Grecia, Italia, Bulgaria y Reino Unido.
Durante los próximos tres años, estas entidades determinarán el perfil necesario para que los voluntarios deportivos se conviertan en agentes de cambio social y promoción de la salud. Este voluntario recibirá un plan de capacitación específico que favorecerá una mayor empleabilidad. Además, también ayudará a crear un mejor sentido de pertenencia a Europa y un sentido de ciudadanía europea. Con la organización de eventos deportivos multiplicadores, MOVE pretende la mejora de la salud física, pero también la mental y la social, donde sea prioritario la adhesión y el acceso a prácticas físicas y deportivas igualitarias.
Porque MOVE quiere una Europa más sana y justa, donde los jóvenes sean uno de sus principales protagonistas, como agentes de cambio social, como voluntarios deportivos.
