Sumando investigación y empresas

La suma de la investigación y de las necesidades del mundo empresarial ofrece un resultado indiscutible: la innovación y la competitividad. Desde las universidades este es uno de los principales retos, que está unido a promover la emprendeduría como nuevo elemento de esta gran ecuación que pretende que la Universidad sea un motor de progreso.

Cada año, los espacios de colaboración y de encuentro de investigadores y directivos empresariales alcanzan mayor protagonismo en las universidades. El reto es promover una transferencia de conocimientos efectiva, que innove en el sector empresarial y que genere más progreso económico y social en su entorno.

En la ULPGC, estos espacios ponen de manifiesto que la colaboración de centros de investigación y empresas ya es real, y que de ellas han surgido proyectos muy interesantes que ya comienzan a implantarse y ser un hecho.

Algunos de estos ejemplos se dieron a conocer en el reciente evento SUMA, celebrado en la Fundación Parque Científico y Tecnológico de la ULPGC. SUMA se enmarca en el proyecto INNOMAC, cofinanciado por dos fondos europeos y que lidera la Sociedad de Promoción de Gran Canaria (SPEGC). Su objetivo es promover y mejorar la competitividad de las pequeñas y medianas empresas de Canarias. Y para ello, el ingrediente básico es la investigación y la innovación.

ELITTORAL

Así de claro lo tuvo la empresa Elittoral, una consultora ambiental especializada en el medio marino y cuya principal actividad está basada en desarrollar planes de vigilancia y control, de caracterización y predicción del comportamiento del mar y de la gestión de zonas costeras. Su directora, Rosana Álvarez, valora especialmente su intensa colaboración con investigadores de la ULPGC y especialmente con el grupo que lidera el profesor e investigador Luis Hernández Calvento en el Instituto de Oceanografía y Cambio Climático de la ULPGC.

“Luis y su grupo nos han aportado su visión científica de cómo tratar diferentes aspectos sobre los sistemas arenosos litorales, atendiendo al replanteamiento de las metodologías utilizadas hasta el momento, los criterios y los estándares a tener en cuenta para evaluar su estado de conservación y el efecto del cambio climático sobre ellos”, explica. Y, al mismo tiempo, señala que esta relación es positiva por ambas partes, puesto que “nuestra empresa ha aportado en los proyectos abordados conjuntamente la disponibilidad inmediata de personal de alta especialización y multidisciplinar y de equipos de medición de última generación, pero también ha sido importante el contacto del investigador con las necesidades reales de la sociedad”.

Rosana Álvarez (Elittoral): “Nuestra empresa ha aportado en los proyectos abordados conjuntamente con la ULPGC la disponibilidad inmediata de personal de alta especialización y multidisciplinar y de equipos de medición de última generación, pero también ha sido importante el contacto del investigador con las necesidades reales de la sociedad”. 

Así, han surgido en estos últimos años proyectos de gran importancia para esta empresa con más de una década de experiencia en el sector marino: el Proyecto TELECAN, que ha logrado implantar una aplicación software basada en la teledetección, para el estudio de la calidad ambiental en zonas costeras y espacios protegidos arenosos; el Proyecto ARTeMISat, basado en imágenes hiperespectrales que permiten hacer valoraciones de las consecuencias de cambio climático en zonas costeras y en el medio marino; o los proyectos DUNCAN y MASDUNAS, que ha posibilitado realizar experiencias pilotos en la duna costera de Maspalomas que han permitido determinar medidas de restauración ambiental y la reposición de la arena en esta zona.

Tal y como explicaron la empresaria y los investigadores de la ULPGC, su colaboración ha sido un éxito durante estos últimos siete años. La franja costera de Gran Canaria ha sido su espacio de encuentro, donde la I+D+i de la ULPGC se ha dado la mano con la empresa.

LIGHTBEE

La misma sensación colaborativa y de unión ha surgido entre la empresa Lightbee, una start-up de base tecnológica, y el grupo de Fotónica y Comunicaciones del Instituto Universitario para el Desarrollo Tecnológico y la Innovación en  Comunicaciones (IDeTIC), de la ULPGC. Ambos colaboran hace una década en el campo de las telecomunicaciones, la domótica y la optoelectrónica, con proyectos basados en la tecnología VLC (comunicaciones ópticas por luz visible).

“Fruto de los trabajos realizados en este campo, en Ligthbee se ha desarrollado el know-how necesario para la generación de aplicaciones y soluciones específicas”, destaca el investigador del IDeTIC, José Alberto Rabadán. La importancia de los resultados alcanzados en este campo tecnológico, junto con el potencial de sus desarrollos y aplicaciones, han dado como resultado un importantes reconocimientos internacionales. Y, además, en la actualidad, esta empresa ya cuenta con una patente concedida en Estados Unidos y Europa.

Las comunicaciones ópticas por luz visible son una variante de la comunicaciones ópticas no guiadas, es decir comunicaciones en las que la información está contenida en energía lumínica que se transmite por el aire (a diferencia de los sistemas de fibra óptica donde la luz está confinada en conductos de vidrio). El auge de estas comunicaciones se debe principalmente a la aparición de los sistemas de iluminación basados en dispositivos semiconductores, las conocidas lámparas LED. Estos dispositivos no solo mejoran el consumo y la durabilidad de las lámparas, sino que permiten modificar la intensidad luminosa de tal forma que se pueden usar simultáneamente como fuente de luz y sistema de transmisión de datos sin que los usuarios noten alteraciones en la iluminación. Este doble uso como lámpara y transmisor ha dado pie al concepto de “illumication”.

José Alberto Rabadán (IDeTIC): “Fruto de los trabajos realizados con la empresa Lightbee en el campo de las telecomunicaciones, hemos desarrollado el know-how necesario para la generación de aplicaciones y soluciones específicas”.

Las posibles aplicaciones son innumerables, dado que hay lámparas LED en casi todas partes. Si hay que destacar algún proyecto en concreto que ha sido un éxito entre los investigadores de la ULPGC y la empresa Lightbee, sin duda sería Lightkey, en el que se utilizan las comunicaciones por luz visible como medio para la apertura de puertas y el control de acceso. En concreto el sistema consiste en una cerradura electrónica que se activa mediante un código de identificación transmitido mediante una señal luminosa. Como generador de dicha señal se utiliza un Smartphone lo que elimina el uso de llaves físicas y permite a los usuarios tener acceso de forma sencilla a través de una aplicación descargado en su teléfono.

Para la empresa, el apoyo de los investigadores del IDeTIC ha supuesto crear muchas oportunidades de crecimiento y ser una empresa referente a nivel internacional, participando en proyectos de empresas competitivas. Y desde el punto de vista de los investigadores universitarios, esta suma de investigación y empresa es una gran ocasión de participar en soluciones empresariales, “afrontando proyectos de alto nivel y competitividad internacional, por lo que sentimos que se cumple uno de nuestros objetivos como comunidad universitaria”, explica José Alberto Rabadán. “Es una manera de devolver a la sociedad el esfuerzo que supone mantener y apoyar una universidad y se justifica ante ella, no solo como un medio para conseguir una formación superior, sino como una herramienta importante para el desarrollo intelectual y económico de la sociedad canaria en general”.

BIOBAB

Por su parte la investigadora del Banco Español de Algas, Corina Moya, y la directora de la empresa Biobab, Daniela Nikolova, coinciden en valorar como “muy positiva y beneficiosa” la colaboración de universidad y empresa, ya que ha posibilitado la elaboración de una nueva gama de posibles productos biopesticidas y bioestimulantes para el sector agrícola, “poniendo en valor las cepas de la colección del Banco de Algas en los últimos seis años”.

Daniela Nikolova (Biobab): “La relación de la empresa y la universidad ha sido muy positiva y beneficiosa, ya que ha posibilitado la elaboración de una nueva gama de productos biopesticidas y bioestimulantes para el sector agrícola, poniendo en valor las cepas de la colección del Banco de Algas en los últimos seis años”. 

Biobab, empresa canaria especializada en soluciones innovadoras y de alta tecnología para la agricultura, se ha centrado siempre en idear nuevos productos respetuosos con el medio ambiente, de aplicabilidad segura y que ayudan a aumentar la producción y rentabilidad de los cultivos y protegerlos de forma natural. Junto a los investigadores de la ULPGC, en el Banco Español de Algas, han abordado distintos servicios relacionados con la selección y producción de biomasa de determinadas cepas de microalgas, así como la obtención de extractos para su valoración en productos agrícolas. Sus resultados son una auténtica revolución en lo que concierne a la comercialización de nuevos productos, que permiten renovar un sector tradicional como es la agricultura y generar mayor empleo de calidad.